Omega Gel

El Própolis tiene propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y antimicrobianas, por lo que favorece la cicatrización de heridas y la regeneración de tejidos.

Los compuestos bioactivos, como flavonoides y ácidos fenólicos, y los ésteres, terpenoides, esteroides y aminoácidos son los responsables de las propiedades antiinflamatorias del própolis, inhiben la ciclooxigenasa (COX) y, por tanto, inhiben la biosíntesis de prostaglandinas, lo que favorece la reducción de la concentración de citoquinas inflamatorias.

Los animales presentan un elevado nivel de tolerancia al Cannabis Sativa L., con un buen perfil de seguridad y sin toxicidad clínica registrada en la literatura científica.

El aceite de semillas de cáñamo es una fuente rica en ácidos grasos poliinsaturados, también conocidos como ácidos grasos esenciales. Reciben esta denominación porque el organismo no es capaz de sintetizarlos, por lo que su aporte se garantiza exclusivamente a través de la alimentación.
Estos compuestos bioactivos se conocen por sus efectos beneficiosos para el sistema cardiovascular y el manejo de la inflamación.

La Echinacea Purpurea es una planta perenne que pertenece a la familia Asteraceae y es original de Norteamérica. Cuenta con propiedades antiinflamatorias, antimicrobianas, antioxidantes e inmunoestimulantes, gracias a su actividad de estimulación de la fagocitosis.

La Borago Officinalis pertenece a la familia Boraginaceae y es original del continente europeo y del norte de África. Su aceite contiene elevados niveles de ácidos grasos esenciales, así como de ácido linoleico (LA) y ácido gamma-linoleico (GLA), ambos importantes para la estructura y función de la piel.

Los Aceites de Pescado contienen elevados niveles de ácidos grasos poliinsaturados de cadena larga Omega 3, como el ácido eicosapentaenoico (EPA) y el ácido docosahexaenoico (DHA). No son sintetizados en animales, por lo que se consideran ácidos grasos esenciales. El EPA y el DHA integran los fosfolípidos de la membrana celular y presentan funciones específicas funcionales, metabólicas, de señalización y de regulación de la respuesta inflamatoria.

Fundamental para la epitelización, pues actúa como cofactor en numerosos factores de transición y sistemas enzimáticos, por lo que es muy importante en tejidos como la piel, que experimenta una frecuente renovación celular. Las metaloproteinasas de la matriz dependientes del zinc participan en la migración de queratinocitos y en la cicatrización de heridas.